agosto 2, 2020
Pasemos Al Otro Lado
Introducción:
Prediqué éste mismo sermón en el domingo 22 de noviembre de 1993; era mi primer domingo como pastor de esta iglesia. Eran varias las cosas que yo miraba en la congregación, frustración, expectativa, duda, pero nunca ví que se habían dado por vencidos y que deseaban salir de un círculo que había encerrado a esta iglesia por años.
Al conocer el ritmo y estilo de vida de la frontera, asumí el papel de “coyote” para todos aquellos que me habían contratado para que fuera el líder que los llevara a lugares a donde nunca habían estado. Tuve que usar de esa analogía, ya que nuestros compatriotas y miles más de centroamericanos intentan cruzar el Río Bravo para buscar nuevos horizontes en éste país.
Después de 27 años servidos como pastor y entrando en el 28avo. Se me hace aún más fácil predicar éste mismo sermón a cientos y cientos de hermanos que no lo escucharon la primera vez. Corría todo tipo de riesgos que no me creyeran, que no me siguieran o que no quisieran hacer el intento de cruzar, pero lo hicimos, cruzamos y ahora estamos muchas pero muchas veces mejor de cómo iniciamos. Ahora que estamos iniciando otro proyecto aún mejor que el primero, les vuelvo a decir PASEMOS AL OTRO LADO.
Vamos a observar algunos detalles: Marcos 4:1; 4:10;4:34 -35
- Era una multitud la que había escuchado a Jesucristo
- Pero solamente a Sus Discípulos les dice que pasen al otro lado
- Las multitudes no están dispuestas a pagar el precio
- Los discípulos sí
- Las multitudes solamente esperan favores
Los discípulos quieren participar