Sermón # 308
Domingo 27 de abril del 2008 – am.
Por
Rev. Carlos Navarro – Pastor
Título:
“Entendí hasta que…”
Texto: Salmo 73:21-28
Introducción:
No se si a usted le pasa lo
que a mi, pero a veces me he hecho varias veces la pregunta… porqué la vida de
los personajes de la Biblia tiene que ser más bonita que la de nosotros, si el
Dios de ellos es el mismo Dios de nosotros?
La respuesta
no se hace esperar y es simple, ya que la vida de los personajes que nosotros
leemos en la Biblia estaba rodeada de escenas y capítulos en los cuales cada uno de ellos fueron muy sensitivos
a la voz de Dios. Fueron personas que
supieron escuchar a Dios, fueron personas que supieron temerle a Dios, fueron personas que sabían que era mejor someterse a Dios que revelarse a El.
Han pasado miles de años y
aunque las circunstancias son diferentes, Dios no deja de manifestarse en cada
una de la vida de nosotros, tenemos mucho que ganar si hacemos su voluntad y
tenemos mucho que perder si vamos en contra de lo que El ha establecido. Si hacemos lo correcto ante sus ojos, un
mundo de bendición, de dicha y prosperidad nos espera, pero si decidimos hacer
todo lo contrario, es mejor que nos
preparemos a pagar las consecuencias de desobedecer.
En el salmo
que recién hemos leído, vemos la más clara descripción de un hombre que había
llegado a irritarse al extremo y llegó al punto de reclamarle a Dios,
preguntándole porqué la vida de los que viven lejos de Dios es más fácil y
aparentemente más atractiva que la de aquellos que quieren vivir piadosamente
siriviendo a Dios. En el mensaje de hoy
nos daremos cuenta de personas que han tristemente aprendido ó entendido
después que las desgracia les visitó.
Usted y yo no queremos esperar que eso llegue para entender.
1.- Entendí hasta que perdí mi salud:
Salmo 73:22
·
Dejé
de fumar, cuando se me detectó cáncer en la laringe
·
El testimonio del dueño de un restaurant!
·
Deje
de tomar, cuando me dí cuenta que
perdí mi salud por el vicio.
·
Pero
nunca quise escuchar a los que me aconsejaban
·
Dios tiene varias forma de enseñar
·
Yo
prefiero que me enseñe a que se vea forzado en hacer entender
·
Salmo 119:71;
2.- Entendí hasta que perdí mi trabajo: Salmo
32:8
·
Abusé
muchas veces de que era una persona competente
·
Dependí
muchas veces de mis habilidades
·
Me sentí
indispensable
·
Muchos
me hablaban que fuera más responsable,
que fuera puntual, que me llevara bien con mis compañeros de trabajo.
·
Hasta
que llegó una evaluación entre el mismo personal, todos decidieron que fuera yo el que
tenía que salir de la empresa.
3.- Entendí hasta que perdí a mi familia: Salmo
73:27
·
Mi familia
se cansó de mi mal trato
·
Perdí
a mi esposa (o)
·
Perdí
el cariño y el respeto de mis hijos
·
Y ahora que entiendo que fuí yo el que salió perdiendo, se me hace
imposible cree que los tuve y cuand los tuve no los supe apreciar.
Quiero entender
antes de que tenga que perder!
Acepte a Cristo hoy!