“Y a tí qué...?”
Predicado el domingo 3 de febrero del 2002 Am.
Texto: Juan 21:20-22
Introducción:
Después de lo que nuestra iglesia há sido testigo y
pro-
tagonísta a la vez, creo que no no hay duda de que
Dios
há estado viendo realizado su más grande deseo de que
su gente se salve y tengan un encuentro personal con
Cristo.
La noche del domingo pasado vino a convertirse en la
noche de gala, meta alcanzada y superada, 76
conversio-
nes, no hay cosa más pero más refrescante y
satisfactoria
que trabajar para Dios y que El al final venga y
premie
como solo El lo sabe hacer.
Hemos anvanzado a pasos agigantados, hemos visto evo-
lucionar nuestra en forma maravillosa, la bendición no
deja de caer y tenemos que aprovechar que la gracia de
Dios está sobre éste pueblo.
Hemos llamado a cada año con un título en particular,
El año de conocer mejor a Dios
El año del servicio a Dios
El año de la entrega total
El año de las misiones
Nos hemos acostumbrado a que todo lo que hacemos
sale bien, debemos de preparanos para que cuando las
cosas no es que no nos salgan bien, sino que alguien
venga y al ver que es bueno, quiera destruír lo que se
há
hecho con las manos de Dios.
Algunas iglesias no han comenzado bien el año 2002,
Algunas iglesias no han tenido pastor por los pasados
5 años.
Algunas iglesia han tenido que comenzar sufriendo el
año 2002.
El texto que recién hemos leído contiene el título de
nuestro sermón de ésta mañana.
Y a tí que...?
Los tiempos no están para caer en letargo, los tiempos
no están para dar pasos para atrás en el evangelio.
Los tiempos no están para fijarnos en los demás y sus
acciones sino que están para afianzar y solidificar
nuestras
creencias y convicciones.
Veamos un par de casos en la Biblia que dejarnos
llevar por el concenso popular y no la voluntad
Divina.
1.- Los hombres de Bet-semes: 1
Samuel 6:19
Números 4:5,15
- La curiosidad
mató al gato
- La falta de
convicción se llevó a muchos
- Cuando el
critero de los demás pesa más que el suyo
2.- Los que su deleite es el inventar cosas:
Hechos 17:16-21
- Los que no se sacian con solamete oír
- Los que no saben callarse
- Los que calientan el teléfono - INTERVENIR !!!!
- Que así fueran para aprender la Biblia
PROVERBIOS 16:28
PROVERBIOS 17:9
3.- Los que desalientan a los demás:
Números 32:1-13
-NO sea víctima de los fracasados
-No se amargue la vida por otros
-No se prive de la corona por el deseo mundano de
otros