“Enfrentando el Desánimo”
Predicado el domingo 24 de junio del 2001
Texto: Números 21:1-7
Introducción:
Si usted respira, usted es un candidato a experimentar
algún día el desaliento, el desánimo. No
podrá escaparse, tarde
o temprano le visitará.
Bueno, algunos por no saber manejar el desaliento ya
lo
han hecho huésped de honor.
El desaliento no respeta a nadie, no respeta edad,
sexo,
posición social, económica, afiliación política, día o
noche. No puede
evitar que llegue, pero sí puede comba-
tirlo y expulsarlo de su vida.
Muchos cometemos el error de alimentar el desaliento
con actitudes derrotístas, cuando tenemos las armas
para alejarlo de nosotros para siempre y vivir vidas
victoriosas.
Algunos dicen que el desaliento es el catarro de
las emociones!
Algunas
situaciones que causan el
desaliento:
1.- Una enfermedad
2.- El abandono
3.- Desempleo
4.- Divorcio
5.- Problemas económicos
6.- La muerte de un ser querido
7.- La prisión
8.- Frustraciones etc. etc.
Al cristiano,
todas éstas cosas le conducen a perder el sentido de
la vida cristiana,
se queja de todo, inclusive de Dios, pierde el apetito por conocer más de Dios,
pierde el gozo de haber sido salvo, todo le parece absurdo, ya no quiere
continuar.
Salmo 51:12
Al no creyente, el
desaliento, lo conduce a ahogarse en sus problemas, se refugia en el alcohol,
las drogas, amistades y muchos han optado por emigrar.
Isaías 55:2
El Temor de Equivocarme
El error más grande lo cometemos cuando por temor
a equivocarnos, perdemos...
No se equivoca el río cuando al encontrar una montaña
en su camino, retrocede para seguir avanzando hacia el
mar...
Se equivoca el agua que por temor a equivocarse se
estanca y se
pudre en la laguna.
No se equivoca la semilla cuando muere en el surco
para hacerse
planta; se equivoca la que por no morir bajo la tierra
renuncia
a la vida.
No se equivoca el pájaro que ensayando el primer vuelo
cae al suelo,
se equivoca aquel que, por temor a caerse, renuncia a
volar
y permanece en el nido.
No se equivoca el hombre que busca cada día a
Jesucristo,
se equivoca aquel que apesar de las circunstancias de
la vida, se entrega al desgano y se refugia en lo
efímero.
Formas de combatir el desánimo:
1.- Recordar que en otras ocaciones, Dios es el
que nos há
liberado; y posiblemente de peores.
2.- Mantengamos nuestros ojos en Dios y no
en los
problemas!
El chino que subió en el Monte Everest!!!
3.- Confíemos siempre en las promesas de Dios:
Isaías 40:29-31 / 41:10
Algunos de los GRANDES que experimentaron
el desánimo!
Jeremías 15:10
El Rey David -
Salmo 77
Josué - Josué
7:7
Pablo - 2 Timoeo 4:9-18
Que el desánimo no lo prive de hacer
grandes cosas para Dios!!!