Sermón # 1453
Domingo
8 de Abril del 2016 – am.
Por Rev. Carlos Navarro – Pastor
Título: “¿Y Nuestra
Pasión por Cristo?”
Texto: 2 Samuel
10:11-12
Introducción:
Antes de que Cristo viniera al mundo a
Salvarnos y hacerlo de esa forma apasionada que lo hizo, ya había habido
hombres y mujeres de Dios que habían vivido intensamente su fe, que habían
vivido de una forma ilimitada para Dios.
La lista es enorme:
- Enoc
-
Abraham
-
Isaac
-
Jacob
-
José
-
Moisés
-
Josué
-
Jefté
-
Gedeón
-
Samuel
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David
-
Josías
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Job
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Nehemías
-
Ezequías
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Elías
-
Eliseo
-
Isaías
-
Jeremías
-
Daniel – Sadrac – Mesac y Abed – Nego
- Etc.
Ninguno de ellos fue nuestro Salvador, pero sus vidas
fueron la viva representación de lo que una persona enamorada de Dios puede
hacer. Podríamos hacer un sermón de cada uno y el resto de los que faltan del
Nuevo Testamento; incluyendo mujeres maravillosas que hicieron lo mismo. Pero
creo que entenderemos la idea con un solo sermón.
1.- Josué vivió sirviendo apasionadamente:
Josué 23:1-3
·
Sirvió a Dios toda su vida
·
Llegó a anciano y nunca perdió esa pasión por Dios –
·
Transmitió esa pasión a otros – 24:1
·
Muere satisfecho de haber hecho y de haber visto lo que Dios hizo por
Israel
2.- Elías vivió sirviendo apasionadamente:
1 Reyes 19:10
·
Sirvió y vivió toda su vida de una forma Intensa
·
***El borrachito en la procesión!!!
·
Supo transmitir esa pasión a su sucesor Eliseo – 19:19-21
·
Dios le premió llevándolo al cielo sin experimentar la muerte
·
2 Reyes 2:11
3.- Pablo vivió sirviendo apasionadamente:
2ª. Corintios
12:14-15
·
Seguramente no podemos inclinarnos por alguno en particular, pero cada
uno de los que hemos visto hoy, sirvieron a Dios de una forma intensa y lo
hicieron en el momento que se les presentó.
Hechos 14:1
·
Ellos dijeron… si algún día voy a servir a
Dios… ES HOY!!!
·
TODO LO QUE TE VINIERE A LA MANO PARA HACER…
HAZLO SEGUN TUS FUERZAS.
·
Todos ellos habían leído el pasaje inicial que leímos en Eclesiastés 9:10
POR LO
TANTO, ES HOY EL DIA PARA SERVIR A DIOS! Que Dios nos dé la vida suficiente para
apasionarnos por El, que tengamos el tiempo suficiente para motivar a otros a
apasionarnos por Cristo, será el mejor legado que dejemos a otros.